El secretario de Interior y Policía, Franklin Almeyda, informó que en el país han sido asesinadas este año unas mil 440 personas, de las que 397 murieron a manos de delincuentes y 943 de ciudadanos comunes. Expresó que lo lamentable de la situación es que la mayoría de las víctimas, un 58.4%, eran jóvenes en edades comprendidas entre los 18 y los 34 años.“Lo lamentable de la situación es que las víctimas son jóvenes de 18 y 34 años, en un 58.4%, y que en un 62.5% se producen de 6 de la noche a 6 de la mañana, de lunes a jueves, el 55.2%”, indicó.
Explicó que la mayoría de las víctimas han muerto por algún tipo de arma de fuego (66%), casi todas amparadas con permiso legal.
El funcionario dio a conocer el informe en un encuentro con los gobernadores provinciales, con quienes abordó temas relacionados con la reevaluación general del Plan de Seguridad Democrática, la ampliación y puesta en ejecución de la segunda etapa del plan, y los Consejos de Desarrollo Provinciales y Municipales.
Almeyda dijo que los resultados de la investigación indican que la mayoría de las víctimas son hombres (92%) y sólo un 7.4% corresponde a mujeres.
Asimismo, informó que las muertes por armas blancas han disminuido, ya que sólo registra el 46%, y que en el país hay 600 centros de diversión y 65 mil colmadones y colmados.
Expresó que cuando se le atribuye la exclusividad de los crímenes a la delincuencia se está partiendo de una premisa falsa, debido a que la violencia en la sociedad es la principal victimaria de los jóvenes.
Manifestó que esa situación conduce a las autoridades a adoptar mayores medidas sobre el control de armas, a reducir los espacios nocturnos que inducen a la violencia, y a lanzar una campaña nacional sobre la violencia.
“La juventud masculina de nuestra sociedad está siendo afectada por ella misma y a eso debemos darle persuasivamente una solución”, puntualizó.
